Celebramos el fin de curso con nuestro voluntariado, el alma de Prodean.
Muchas manos generosas que se unen a lo largo del año para acompañar, enseñar, ayudar, aprender y construir desde la solidaridad un mundo mejor.
Hubo reconocimientos a los voluntarios más comprometidos, por su trabajo desinteresado, por su labor… y porque nos hacen mejores.
Desde Fundación Prodean agradecemos su servicio incondicional que convierte en realidad nuestros proyectos, completándolos, haciéndolos llegar a tantisimas personas y llenándolos de sentido.
¡Gracias!